Cosas en las que fijarte (Parte 2)
En este apartado nos centraremos en el ciclo de la ropa. Incorpora en sí la lavadora, la secadora y la plancha.
Ciclo de la ropa
Secadoras
En todos los casos la presencia de secadora suma un considerable gasto de electricidad (y de gas en algunos casos)
Las ventajas innegables que presentan es que aceleran el ritmo al que la ropa puede ser lavada y hacen la vivienda independiente del tiempo ambiental. También hay que añadir que en zonas de humedad permanente elevada pueden pasar de ser un aparato de comodidad añadida a algo necesario. Los rangos de precios varían mucho según el tipo de aparato (aparte del precio, algunas necesitan instalación)
Lavadoras
Es difícil imaginarse una vivienda sin lavadora. Las diferencias principales a valorar es la capacidad de ropa, la distribución del motor y posibles opciones adicionales como las lavadoras con función de secado. Una manera de hacerse a la idea del desgaste del aparato y conocer el estado real de lo que se tiene es poner un lavado sin llenar la cuba y mirar el movimiento de la lavadora durante el centrifugado. A medida que se usa, los amortiguadores de la lavadora se desgastan y la lavadora empieza a vibrar o moverse de manera descontrolada.
Por mucho que pueda seguir funcionando así, indica un desgaste alto que hay que tener en cuenta.
Precio medio: 400-500 € (8 kg)
Precio económico: 200-300 € (6-8 kg)
Plancha
Entre las tareas del hogar de las pocas que no han perdido lo arduo y el gasto temporal está el planchado. A valorar está la cantidad de ropa a tratar. Supone una enorme diferencia entre una plancha de vapor convencional y un centro de planchado. Un centro de planchado hace este proceso más ameno y realmente supone una importante diferencia en la rutina del día a día. Aunque parezca obvio, si se plancha en sitios cerrados es recomendable posteriormente ventilar la habitación para evitar acumulación de humedad en el aire.
Precio medio: 80-150€ (centro de planchado)
Precio económico: 30-60 € (plancha de vapor)
